15 de diciembre: Queremos ser una democracia

La Transición echó a andar con el Referéndum de Reforma Política del 15 de diciembre de 1976, apenas un año después de la muerte de Francisco Franco.
Hoy hablamos de un año histórico y de los personajes que movieron los hilos.


España elige Sí

El miércoles 15 de diciembre de 1976 se convocó a las urnas a los españoles mayores de 21 años. Debían votar en referéndum la pregunta que decía así: ¿Aprueba el Proyecto de Ley para la Reforma Política?

Votó el 77 por ciento del electorado y el 94 por ciento dijo: SI.
Y así, un día como hoy pero de hace 44 años, se inició la Transición, después de una dictadura de 37 años.

Pregunta del Referéndum en el que se eligió la democracia. Foto Creative Commons.

Hola, soy Ana Nieto y esto es Calendario de Historias un podcast con el que Audire les lleva a recordar el pasado, sus personajes y lo que nos queda de ello.

Cuando Francisco Franco murió el 20 de noviembre de 1975 nadie sabía con certeza qué iba a pasar en España. Era ya la única dictadura en Europa Occidental. Y los países de nuestro entorno perdían la tolerancia hacia actos represivos, como lo habían demostrado las protestas internacionales por las ejecuciones de septiembre de ese año.

Los españoles, asfixiados por una crisis económica brutal y hartos de la situación, se manifestaban en las calles y se declaraban en huelga. Y mientras el terrorismo sacudía al país, el régimen se mostraba dividido entre inmobilistas, que aspiran a perpetuar el franquismo sin Franco, y aperturistas, que ambicionan cierta normalidad democrática.

Todos los ojos estaban puestos en tres instituciones: jefatura del estado, presidencia de gobierno y las cortes.
La Jefatura del Estado correspondía al rey Juan Carlos I. Franco había elegido como sucesor al nieto de Alfonso XIII, saltándose en el orden sucesorio a don Juan, el padre del elegido.

Hasta ese momento, el rey, era una incógnita. Era cierto que había jurado lealtad al régimen al que le debía la posición. Pero también era cierto que tenía una pésima relación con los elementos más reaccionarios de la falange.

También era cierto que tenía pendiente su legitimación dinástica y que no se entendía con Carlos Arias Navarro, presidente del gobierno desde el último día de 1973.

Arias defendía el franquismo sin Franco. Su larga hoja de servicios a la dictadura incluían los puestos de ministro de la gobernación, alcalde de Madrid, gobernador civil y Director General de Seguridad. Pero muchos le conocían no por sus cargos, sino por su apodo: el Carnicero de Málaga, por su papel represor durante la Guerra Civil.

Las Cortes eran el tercer vértice en las instituciones de poder en España. En realidad era un pseudoparlamenteo. Podía llegarse procurador, como así se llamaba a sus miembros, en función del cargo que se ocupaba dentro de la estructura del estado, por designación Jefe del Estado o por elección.
Entre estos últimos se elegían dos procuradores por provincia en representación de las familias. Los hombres debían ser cabezas de familia mayores de 21 años y las mujeres, mayores de 25 y casadas.

A los pocos días de la muerte de Franco, el 6 de diciembre, se nombró presidente de las Cortes a Torcuato Fernandez-Miranda. El nombramiento se lo debía al recién proclamado rey, que así comenzaba a mover sus fichas. Había elegido para el cargo a su profesor de Derecho Político, quien debía, además, presidir el Consejo del Reino.

En su discurso de posesión como presidente de las Cortes, Fernández Miranda dejó entrever su posición: Me siento absolutamente responsable de todo mi pasado. Soy fiel a él. Pero no me ata.

Y con ese tablero de juego cerró 1975 y abrió 1976.

El Rey propuso a Arias un cambio de gobierno, a lo que accedió y Fernandez-Miranda propuso a Adolfo Suárez como Ministro del Movimiento.

Pasaban los meses y Arias Navarro, enrocado en su posición inmovilista tenía problemas de entendimiento con las Cortes y con el Rey.

Y dos eventos contribuyeron a restarle apoyo: primero el Suceso de Vitoria, cuando la Policía Armada atacó una asamblea de obreros en huelga matando a cinco.

Después, el Suceso de Montejurra, cuando en una romería carlista un grupo formado por un sector del carlismo, franquistas acérrimos y fascistas extranjeros atacaron a otro grupo carlista.
La refriega empezó con gritos de Viva Cristo Rey. Degeneró a pelea con palos y acabó en ráfagas de metralleta. Todo bajo la mirada pasiva de la Guardia Civil. Murieron dos personas.

La tensión entre el Rey y su jefe del gobierno se volvió inmanejable. Y después de una reunión entre ambos, Arias Navarro presentó su dimisión el 1 de julio.

Y ahí volvió a entrar en escena Fernandez Miranda con un papel estelar. Como Presidente del Consejo del Reino convocó a sus miembros para presentar al Rey una terna de candidatos para que éste escogiera al próximo presidente del gobierno.

Se partió de 32 candidatos. Se votó repetidas veces durante dos días. Mientras, Fernandez Miranda hacía pedagogía y movía los hilos. Y al final, se llegó a tres candidatos. Explicando ese momento, Fernández Miranda dijo: “estoy en condiciones de ofrecer al Rey lo que el Rey me ha pedido”.

Y lo que el Rey le había pedido era Adolfo Suárez.

La labor primordial del nuevo presidente era elaborar de un proyecto de ley de reforma política.
Pero se enfangó. Y de nuevo Fernandez-Miranda acudió al rescate. Recogió todas las propuestas, trabajó sobre ellas y presentó un borrador que “no tiene padre”, pero que respondía a su pensamiento de ir de la ley a la ley a través de la ley. Es decir, reformando, no destruyendo.

Y ese fue el proyecto que se presentó a las Cortes y fue aprobado el 18 de noviembre de 1976 con 425 votos a favor de un total de 531 procuradores.

La aprobación se consiguió por diversas razones. Unos procuradores creían que era el devenir natural de la historia. A otros se les convenció ofreciéndole posiciones. A otros se les amenazó con cesarlos en sus cargos. Y a otros se les puso delante un dossier elaborado por el SECED, el servicio de inteligencia del franquismo.

Con otros simplemente no hubo nada que hacer y votaron en contra.

Una vez pasado ese escollo, se convocó a referéndum el 15 de diciembre de 1976 a todos los españoles mayores de 21 años y se inició la campaña.

Solamente las asociaciones legales podían pedir el NO o la abstención, con lo que en la práctica toda la campaña fue a favor del SI.

En Cataluña, Galicia y el País Vasco se emplearon, además del castellano, sus lenguas propias.
Hubo un gran despliegue en televisión, radio, prensa escrita y vallas. Y una canción dominó todos los eslóganes.

Y el pueblo habló, con una mayoría muy cualificada. Y así se caminó el primer paso de la Transición. Al año siguiente, 1977, habría elecciones para Cortes Constituyentes y al siguiente, 1978, se aprobaría la Constitución en referéndum.

En cuanto a lo que pasó con los grandes protagonistas de esta historia destacamos que Carlos Arias Navarro, último presidente del franquismo y primer presidente del reinado de Juan Carlos falleció en 1989 a los 80 años de edad ostentando el título de Marqués de Arias Navarro.

Torcuato Fernández-Miranda dimitió en 1977 al considerar que había cumplido su labor. Fue nombrado senador real en las Cortes Constituyentes y después dejó la política. En reconocimiento a su papel se le nombró Duque de Fernández-Miranda y caballero de la Orden de Toisón de Oro. Falleció inesperadamente en Londres en 1980. Tenía 65 años.

Adolfo Suárez, primer presidente de la democracia, dimitió en 1981. Formó su propio partido político, el CDS, por el que fue elegido diputado. Abandonó la política en 1991. Padeció alzheimer y falleció en 2014. Se reconoció su labor durante la Transición nombrándole Duque de Suárez.

El Rey Juan Carlos I abdicó el 19 de junio de 2014. En estos momentos se encuentra en Emiratos Arabes Unidos y su legado está cada vez más enturbiado por sus escándalos financieros.


Y otros 15 de diciembre pasaron los siguientes eventos:

En 1791 en EE.UU. se ratifican las 10 primeras enmiendas de la constitución que se conocen como la Carta de Derechos.y en 1939 se estrenó Lo que el viento se llevó.

Y en España, en 1930 los militares Ramón Franco, hermano de Francisco y Queipo de LLano se sublevaron a favor de la república. Fracasaron en su intento.

Y en 1976, el año en el que en España se celebró el referéndum de reforma política, un golpe de Estado en Argentina depuso a Isabelita Perón.

En EE.UU. Steve Wozniak y Steve Jobs fundaron Apple Computer en el garaje de los padres de Jobs y en China falleció Mao Zedong, máximo dirigente del país desde 1949.

Y cerramos el programa de hoy con una cita de Adolfo Suárez: El futuro no está escrito, porque sólo el pueblo puede escribirlo.”

Y esto es calendario de Historias por hoy. Gracias por haber compartido este ratito con nosotros, quienes lo hacemos Maria Luz Rodrigues y yo ana nieto les agradecemos la atención, Mañana será otro día.

La música del programa es de EpidemicSound y de Aser Rodríguez.
Puedes encontrar todos nuestros podcast en http://www.audirepodcast.com.

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